Un compañero que te amarga la vida puede ser la causa de que decidas irte hastiado. Pero si escoges la opción de aguantar, hay métodos de resistencia. Y hasta puede resultar positivo.
El jefe y los compañeros de trabajo influyen en tu vida laboral hasta el punto de hacerla insoportable, o más llevadera. Depende de la suerte, porque a ninguno lo eliges y debes lidiar con lo que te toque. Ante esto, hay estrategias para aguantar y también para sacar provecho de cualquier situación, por penosa que parezca.

Imagen: internet
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No obstante, algunas compañías han decidido desarrollar programas en los que los empleados tienen cada vez más que decir acerca de las nuevas incorporaciones. En Amazon, por ejemplo, un grupo de empleados tiene el encargo de elevar los estándares de reclutamiento y debe dar el visto bueno a las contrataciones recientes. Son evaluadores cualificados que ocupan puestos a tiempo completo en la empresa, en diversos departamentos, y que, según explicaba recientemente The Wall Street Journal, juegan un papel crucial cuando se trata de incorporar a nuevos empleados.

Resistencia
José Medina, presidente de Odgers Berndtson,estima que no se trata sólo de aguantar. “Hay colegas con los que te tomas una cerveza en un rato libre y disfrutas con ellos, y otros no. Con estos últimos tienes que trabajar lo más eficazmente posible. Trata de hablarle a solas, cara a cara, y observa cómo te responde”.

Ovidio Peñalver, socio director de Isavia, explica que una situación en la que un compañero de trabajo llega a amargarte la vida puede hacerte incluso enfermar si se sostiene en el tiempo. Cree que “cuando uno no puede cambiar a los otros, lo más sensato es cambiar el cómo te afecta y tomártelo de otra manera”. Y anota sus consejos:

– Tratar de comprender al colega que te hace la vida imposible. Desde la empatía y el respeto, puedes tratar de entenderlo. No se trata de darle la razón, sino de ponerse en la piel del otro.

– No caer en el principio de la acción-reacción: “Busca intereses y valores por encima del otro y de ti. Trata de ser justo y leal con la empresa, con el otro y contigo mismo. Debes intentar ser inteligente y cooperador, tratando de tener altas miras. Encuentra valores superiores y procura responder cooperando”.

– Sustituye lo que tú eres por lo que tú haces o dices. Es bueno utilizar el ser por el comportamiento.

– Evita el “no”. Debes decir “sí” y “además”.

– Si el otro te ataca, no respondas de la misma manera. Trata de cooperar con él “rompiendo” las reglas de su juego. Si el otro no practica eso contigo, debes estar por encima de ello. Es lo que distingue al mediano del excelente.

– Ante él y en las reuniones responde siempre con tu trabajo y cooperación. Tu actitud tiene que ser de visión alta de la empresa, no estrecha y de solo “tu departamento”.

– Trata siempre bien al otro. Lo primero es el trato y luego, el entendimiento.

– En el caso de que nada de esto funcione, busca un mediador dentro de la organización, con la seguridad de que no actuar es el peor camino que puedes tomar para resolver el problema.

(Gestión)

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