La brecha en el balance financiero es bastante alta. Existe casi un 10% de diferencia entre los ingresos y los gastos estimados.

Si existen dos sectores que son fundamentales para el progreso del país y que toda política gubernamental moderna suele articular esos son la educación y la salud. El debate –urgente y necesario– ha solido centrarse en el primero; sin embargo, el segundo también está en crisis y desde hace mucho.

La Universidad Continental, Intelfin y Gestión reunieron a expertos como Eduardo Amorrortu, expresidente de ADEX, al economista Pedro Francke, Midori de Habich, exministra de Salud, y Fiorella Molinelli, presidenta ejecutiva de Essalud, en la mesa redonda “Una mirada a la seguridad social”. En ella se realizó un diagnóstico de la situación de Essalud y se abordaron las posibles soluciones a mediano y largo plazo que permitan garantizar un seguro social de calidad para los peruanos.

Cifras de Essalud

Según las cifras entregadas por Fiorella Molinelli , Essalud maneja un presupuesto de S/ 11,000 millones, tiene 56,600 trabajadores y una población asegurada de 11 millones, aproximadamente. Dicha población ha crecido casi 54% en los últimos siete años, con énfasis en los niños y adultos mayores asegurados.

“Es importante aclarar, porque creo que la gente no lo sabe, que Essalud no recibe ni un sol del tesoro público, ni una transferencia del sector público. Es autogestionaria y lo hace a través de los aportes que hacen las empresas por sus trabajadores”, explica Molinelli.

Es así que, resalta, existen una serie de distorsiones que se han ido dando respecto a este aporte y que han generado “una pérdida anual de S/ 2,300 millones, debido a normas, leyes y malas prácticas que han hecho que los ingresos financieros se vayan mermando”.

Por el lado del Estado, existen dos ministerios que no aportan sobre el 100% de ingresos de sus trabajadores, sino solo sobre el 65%: el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación, expone Molinelli.

En esa misma línea, los trabajadores CAS –una planilla especial que tiene el Estado–, los pensionistas y el seguro agrario también representan un peso para la institución, ya que no todos aportan lo mismo. Sumado a ello, existen deudas de S/ 3,800 millones en beneficio de Essalud, informa Molinelli.

“La mayor parte es deuda tributaria, que solo la puede cobrar Sunat. La otra parte es no tributaria, que es aquella deuda por concepto de reembolso de las prestaciones a asegurados de empleados morosos”. Dentro de la deuda general se puede distinguir deuda privada y pública (30% y 70%, respectivamente).La mayoría de las empresas privadas que le debe a Essalud, comenta Molinelli, han sido declaradas como insolventes ante Indecopi; es decir, la deuda es incobrable.

“En el otro grupo se encuentran las azucareras, algunos club deportivos, mineras y constructoras importantes”. Además, en el sector público, quienes más deben son los municipios. “La Victoria nos debe como S/ 115 millones, San Martín de Porres y Breña también nos deben muchísimo dinero”, cuenta.

En relación a las demandas laborales, Molinelli señala que Essalud enfrentó un periodo de huelga difícil y que, con el cambio de gestión, se logró comenzar un diálogo con los trabajadores. “La situación financiera es compleja, pero pudimos acordar con ellos un incremento de la escala salarial para los próximos años”.

La brecha de infraestructura, por su parte, es muy alta. “Calculada internamente, la brecha es de alrededor de S/ 39,000 millones en equipamiento, obras y medicinas”. Y, finalmente, Molinelli admite que se debe cambiar la cultura organizacional para recuperar la voluntad de brindar un mejor trato.

“Debemos recuperar la parte humana y la vocación de servicio en nuestros trabajadores”.

Avances de la gestión

Ante todo ello, la presidenta ejecutiva informa que Essalud ha trabajado un proyecto de ley de fortalecimiento a corto plazo de la seguridad social donde se plantea lo siguiente: la cancelación de las obligaciones que mandan a que Essalud siga asumiendo el pago previsional de la Ley 20530 y la Ley 18846, donde debe asumir S/ 600 millones por año. “Ese tema lo debe asumir la ONP porque no nos corresponde seguir pagándolo”. Y sobre la transferencia de los saldos no ejecutados de los gobiernos locales y regionales para que así Essalud pueda cobrar las deudas acumuladas en el sector público.

Además, respecto al déficit de camas que llega a 5,750, se han recuperado 1,542. También se ha abierto un tercer turno en las especialidades más demandadas, un sistema de citas en línea por la página web y una historia clínica electrónica para mejorar el ingreso de la información.

Dejar respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here