Manuel Villoria Jiménez, quien fuera asesor del jefe de gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, afirma que más que un pacto social, una reforma del Estado requiere de valentía para aplicarla. El profesor visitante de la escuela de Postgrado Universidad Continental comenta este y otros temas.
Para que un gobierno decida reformar el Estado ¿necesita de un pacto social?
Cito la metáfora de un exministro español: nadie puede ganar una carrera de autos, con uno que tiene el motor o chasis inadecuado. El Estado es un coche, puede tener un estupendo conductor pero con un carro que no funciona no llegará a ninguna parte.
Entonces no es necesario un pacto social…
Es fundamental que todos los candidatos asuman que el instrumento a través del cual pueden desarrollar sus políticas, es la administración pública. No pueden hacerlo sin ella. A partir de allí, todo lo que se pueda hacer por consenso, es mucho mejor.
¿Es una condición?
No necesariamente. La democracia es un gobierno por consentimiento y deliberación, debe ser así. Pero si hay que tomar una decisión sin consenso, hay que tomarla.
¿Un país grande tiene un Estado más complejo?
Si, y existen factores que hacen un Estado más complejo que otro. Es evidente que gobernar Luxemburgo no debe ser muy difícil. Son ricos y pocos. Mientras que Perú es un país extraordinariamente complicado por su diversidad.
¿Por dónde empezar una reforma del Estado?
Por la reforma fiscal porque el Estado necesita dinero. Eso suena fatal, ningún candidato lo dice. A nadie se le ocurre sostener que es necesario que la gente pague por los servicios que ofrece el Estado o que los ricos paguen más impuestos. Pero sin eso no hay Estado.
Es un principio…
Ningún país desarrollado ha reducido la presión fiscal en los últimos veinte años. Todo lo contrario, la aumentan e incrementan el gasto público sobre el PBI, sobre todo en la actual crisis económica. Un gobierno tiene que ser muy valiente para tomar esa decisión porque hay que tomarla.
¿Un gobierno tiene que hacer todo con el Estado?
Hay áreas que son exclusivamente estatales como defensa y seguridad. Un gobierno no puede hacer todo con el Estado. Por eso es importante que se pregunte qué quiere hacer con él y qué cosas en colaboración con el sector privado y la sociedad civil.
¿La reforma del Estado es un asunto técnico o político?
Es político porque hay ideas, ideologías, valores en juego, tensiones y conflictos. Uno se pone de acuerdo sobre qué Perú se quiere de acá al futuro. Eso exige diálogo y debate político. Las respuestas técnicas son para construir puentes.
¿Quién hace la reforma del Estado?
Los gestores públicos. Los mejores profesionales del país tienen que estar en el Estado sin lugar a dudas. Bien pagados y formados. El programa de la Autoridad nacional de servicio civil- Servir- es bueno en ese sentido. Perú requiere de una carrera profesional de servicio público sólida, de funcionarios que ingresan meritocráticamente al Estado.
¿Qué países de América latina tienen una administración pública eficaz?
Bueno, AL es absolutamente heterogéneo y complejo. Tiene ejemplos de países que hacen las cosas bien como Chile, Uruguay y Brasil históricamente con una buena administración federal que ha reforzado en los últimos años y lo ha convertido en una potencia en la región. En Venezuela la corrupción es desastrosa. México, está atrapado en una guerra contra el narcotráfico que está perdiendo.
Entrevista de Susana Mendoza Shenn
